San Pedro, el paradigmático singani boliviano nace en el valle de Cinti donde frailes dominicos plantaron, a inicios de la ...###

SINGANI SAN PEDRO, una bebida para celebrar la vida


San Pedro, el paradigmático singani boliviano nace en el valle de Cinti donde frailes dominicos plantaron, a inicios de la Colonia, la primera cepa de la uva Moscatel de Alejandría. Armaron cepas, formaron majuelos, viñedos y alambiques, para obtener esta bebida mundialmente reconocida.

 

| Puede escuchar la nota completa aquí |

 

EDICIÓN 124 | 2023

Raúl Serrano

 

Tras el nombre de Singani San Pedro hay una historia que se cuenta por centurias y que se inicia en el valle de Cinti donde misioneros dominicos encontraron el suelo ideal para el cultivo de la vid. Alrededor de 1550, fundaron la Viña San Pedro Mártir dando inicio a la vitivinicultura de esta parte de América, la crianza del vino y la producción del aguardiente que ganó el gran mercado de Potosí en los tiempos virreinales. Cinti y particularmente San Pedro son los paradigmas de la vid y de sus apreciados frutos particularmente de la uva Moscatel de Alejandría, la más dulce de todas las variedades introducidas por los religiosos.

 

En el siglo XVI la explotación de plata en Porco, la fundación de la ciudad de La Plata, sede de la Audiencia de Charcas, atrajo a muchos españoles a esta parte de América. Más aún, con el descubrimiento del Cerro Rico de Potosí surgió el polo más importante de la América Virreinal y Potosí ostentó el sitial favorito entre las ciudades más grandes de su tiempo. Este centro requería enormes cantidades de productos, entre los que se destacaban miles de litros de vino y aguardiente que se consumían en la celebración de la liturgia pero también en el arduo trabajo minero, en los agasajos y festejos.

 

“Esa es la identidad del producto aparejada a su calidad del mejor destilado de uva Moscatel de Alejandría, una exquisitez que tenemos que aprender a valorar.”

 

 

 

VIÑA SAN PEDRO Y POTOSÍ

 

La historia de Viña San Pedro está estrechamente vinculada a Potosí y registra la trayectoria de cinco troncos familiares de propietarios que fueron personajes prominentes de la economía, política y la sociedad de su tiempo. En Viña San Pedro, plantaron cepas, formaron majuelos y viñedos, armaron lagares para obtener el dulce mosto, cocieron botijas y tinajas de barro, fabricaron odres de cuero y expandieron la tecnología para reducir vino a aguardiente, instalaron falcas y alambiques.

 

Una investigación histórica realizada a lo largo de 20 años, dirigida por la historiadora Esther Aillon que se resume en la obra “San Pedro: testigo de los tiempos”. Por la ruta del singani en Bolivia. Siglos XVI al XXI, refleja la trayectoria de San Pedro Mártir, relatando el paso de cada uno de sus propietarios.

 

Fue el capitán Alonso de Fonseca Falcon de la región de Algarve, Portugal, quien formó el primer tronco de la sucesión. Le siguió el hombre más rico de Potosí colonial el Maestre de Campo Antonio Lopez de Quiroga (1620-1699) cuya familia permaneció en la hacienda durante 114 años. El capitán español Pedro Antonio de Anzoleaga (siglo XVIII), su yerno Indalecio Gonzales de Socasa y su hija constituyen el tercer tronco familiar a lo largo de 77 años.

 

En tiempos del nacimiento de la República la conductora de Viña San Pedro fue María Josefa Lizarazu de Linares, Condesa de la Casa Real de la Moneda, quien era admirada por su carácter dominante como promotora de los valores culturales. Tras la fundación de Bolivia apoyó al Mariscal Antonio José de Sucre el 28 de abril de 1828 en la rebelión del Batallón Voltígeros. A Josefa le sucedieron su hijo Mariano Linares Lizarazu (1819-1869) y su nieta Lucrecia Linares Romero de Calvo (1867-1928).

 

La rama familiar Calvo continúa esta tradición, renovada con la presencia de Carlos Calvo Galindo quien adquirió en 1973 el control mayoritario de San Pedro, adquirió nuevas viñas y modernizó la primera bodega del país. De manera paralela Calvo Galindo implementó un plan social integral en San Pedro que abarcó temas de educación y salud y promovió la investigación que documenta la historia cinco veces centenaria de la Viña y Bodega San Pedro. Este tronco familiar permanece en San Pedro desde hace 50 años.

 

SINGANI SAN PEDRO, LA BEBIDA NACIONAL

 

El singani es la bebida nacional y San Pedro es el primer singani boliviano, escribiendo su historia desde 1550. Ha sido y es testigo de los tiempos en Bolivia. Con San Pedro y sus más versátiles combinaciones llegaron la fiesta, los juegos tradicionales de Bolivia, el cacho, las maratones gastronómicas y una variedad interminable de formas de celebrar la vida. Esa es la identidad del producto aparejada a su calidad del mejor destilado de uva Moscatel de Alejandría, una exquisitez que tenemos que aprender a valorar.

 

A partir de 1980 San Pedro ha promovido muchas acciones importantes de exportación, las mismas que se han registrado con éxito y que son, sin lugar a dudas, el antecedente del reconocimiento actual del nombre de Singani a nivel internacional. En el siglo XX, el producto se ha exportado a Estados Unidos, Japón, varios países de Europa y muchos de la región. San Pedro no ha cesado a lo largo de todo este tiempo de promover los valores de la viticultura en Cinti, alentando la producción de la uva.

 

El singani es la bebida nacional y San Pedro es el primer singani boliviano, escribiendo su historia desde 1550…”